Paseando por el patio de mi casa me sucedió algo extraño. Luego de tres o cuatro pasos mi distracción provoco que golpeara mi frente contra una de las ramas mas gruesas de la parra. Al sacudirse, cayeron muchas hormigas sobre mi. En el afán por quitármelas de prisa comencé a resbalar con las uvas maduras que habían caído. Cuando casi lograba el equilibrio un caracol se atraviesa frente a mi pie, lo piso (pobre caracol… fue un accidente) y resbalo hacia atrás donde mi perro estaba acurrucado y listo para ponerme la traba. Al caer mi cabeza golpeo contra la maceta de las petuñas y me desmayo.
Lo que comencé a ver era más que un sueño, era una visión del futuro, una revelación…
En medio de una canchita de fútbol de barrio se divisan dos pequeños muchachitos. Uno de ellos, por sus facciones, parece ser mi nieto, lleva una pelota de futbol bajo su brazo. El otro, un desconocido muy feo Su conversación no se escucha muy bien, pero de a poco el volumen aumenta y las voces se vuelven mas nítidas:
Nene Nieto: - ¡No jugas nada!, sos re mulero vos –
Nene Nieto: - ¡No jugas nada!, sos re mulero vos –
Nene Feo: - ¡Si no me dejas jugar no sos mas mi amigo! – Mientras sobre su mano izquierda sostenía su celular con pantalla táctil y Wi-Fi y con el índice de su derecha amenazaba con hacer clic sobre “eliminar de mis amigos” en su perfil de Facebook.
Nene Nieto: - Pero si cada vez que te invito no te pones de acuerdo, ¡que no asistiré, que quizas asisto, que asistiré! Nunca se lo que vas a hacer. -
Nene Feo: - Si, tenés razón, pero es porque soy muy indeciso.- [Mientras le muestra nuevamente el celular] –¿No ves que soy fan de “A mi también me cuesta decidirme cuando me invitan a jugar a la pelota”?-
Nene Nieto: - Es cierto, no lo había notado, hace como 3 minutos que no entraba al Facebook, hagamos un grupo que sea “nada mejor que una chocolatada para reconciliarse con una amigo con el cual estábamos por pelearnos por un malentendido antes de jugar a la pelota en la canchita” y digámosle a mamá por el muro que nos prepare la leche que ya vamos.-