Esta vez me remonto a viejas épocas. Aquellas en las cuales disfrutaba de un muy buen trabajo en una gran empresa de administración. Me vestía bien paquete, tenía una oficina, un escritorio, computadora y hasta mis propias biromes que proteger de robos interoficinísticos.
Frecuentemente mis actitudes o comportamientos activaban mi glándula de la premonición y mostraban un futuro posible como reacción a mi acción.
Ejemplo 1:
Día 1:
Marquitos: -Sra. Jefa, ¿puedo mañana venir con alpargatas?-
Jefa: -No.-
Día 2:
Marquitos: -Sra. Jefa, ¿puedo mañana venir con alpargatas?-
Jefa: -No.-
[…]
Día 15:
Marquitos: -Sra. Jefa, ¿puedo mañana venir con alpargatas?-
Jefa: -Si, podes usar alpargatas todo el día de mañana y los siguientes.-
Marquitos: -¡Muchas gracias!-
Jefa: - Sos el primer empleado que me agradece por despedirlo.-
Ejemplo 2:
Jefa: -Estas despedido por vagancia.-
Marquitos: - ¿Vagancia?, pero si estoy trabajando a 5 manos.-
Jefa: -¿Si? ¿Desde cuándo nuestro software de gestión se llama buscaminas?-
Ejemplo 3:
Jefa: -Es el tercer día que llegas una hora tarde, estas despedido.-
Marquitos: - No puede ser, soy el mas puntual de todos los empleados.-
Jefa: -La manera correcta de llegar tarde sin que lo noten es atrasar los relojes de la oficina, no los de tu casa.-